Originariamente, un tren de carretera es un vehículo que arrastra una sucesión de tres o más remolques de carga. Lo que se pretende con SARTRE es desarrollar y probar esta tecnología, pero en este caso para reunir coches corrientes que con este sistema viajarían acoplados a un convoy dirigido por un vehículo principal.
Así, los pasajeros de los coches que se acoplen al Road Train podrán dormir, leer un libro o ver la televisión mientras se dirigen a su destino, sin perder la independencia que supone llevar su propio coche, al que podrán “soltar” del convoy cuando lo deseen.

Medio cómodo y ecológico
Las ventajas de esta idea son diversas: por un lado, los road trains podrían ayudar a reducir el tráfico y, con ello, también los tiempos de los viajes. leer mas